En primer lugar, vamos a prepararla bechamel de coliflor. Para ello debemos cortar la cebolla en cuadraditos medianos, y limpiar y separar la coliflor en arbolitos. Ponemos una olla con agua a hervir y cuando esté hirviendo el agua, pondremos a cocer la coliflor unos 10-15 minutos con un poquito de sal. Por otro lado, ponemos en una olla un poco de aceite de oliva virgen extra a fuego medio y pochamos la cebolla hasta que esté blandita.
Cuando esté lista la cebolla, añadiremos la coliflor cocida junto con la leche, un poquito de sal, pimienta negra molida y nuez moscada. Dejaremos que todo se integre y se haga unos 5 minutos. Batimos con la ayuda de una batidora de mano hasta que quede una textura de bechamel (rectificar al gusto).Reservamos.
Vamos a preparar la base de patata para la lasaña. Pelamos y cortamos las patatas en rodajas finitas y las colocamos en un estuche de vapor Lekué para hacerlas 8 minutos a máxima potencia. También se pueden hacer en el horno, pero necesitarán más tiempo (unos 20-30 min a 200ºC). Reservamos.
Para el relleno de la lasaña, vamos a cortar en brunoise el puerro y una cebolla. Y además, cortaremos en trozos medianos las setas que más os gusten. En una sartén a fuego medio- bajo con un poquito de aceite de oliva virgen extra, pocharemos el puerro y la cebolla hasta que esté blandito (10 minutos). Cuando esté blandito, añadiremos las setas variadas. Dejaremos que se haga todo lentamente. Añadimos sal, pimienta negra molida y perejil fresco al gusto y removemos 1 minuto más. Reservamos.
Para montar nuestra lasaña, nosotros usamos unos moldes de tartar. Pusimos una camita de patata, bechamel de coliflor, unos trocitos de queso de cabra (podéis poner el que más os guste o incluso no añadirlo) y el relleno de setas por encima. Se puede dar un golpe de calor en el horno (pero esto es opcional) y decorar con perejil fresco por encima.